EL VIRUS DE LA INMUNODEFICIENCIA FELINA (FIV)
Las infecciones por FIV en gatos tienen una prevalencia variable dependiendo de la zona geográfica y del estilo de vida de los gatos. En función del virus y de la inmunidad del huésped la infección será más o menos activa y causará enfermedad o no. Es una enfermedad común en nuestro entorno especialmente en gatos de vida libre, colonias o colectividades. Para resolver vuestras dudas y ampliar la información de esta enfermedad nos preguntamos…
¿QUÉ SABEMOS SOBRE ESTE VIRUS?
- Está clasificado como un Retrovirus del género Lentivirus, muy similar al Virus de la Inmunodeficiencia Humana (VIH), de ahí que a veces se refieran a él como el sida felino, sin embargo el FIV NO SE TRANSMITE A LAS PERSONAS, NI OTROS ANIMALES DOMÉSTICOS (perros, conejos…)
- La prevalencia (proporción de animales infectados en una población) es muy variable según regiones y se encuentra entre el 1-14% en gatos sanos, y 44% en enfermos
- La infección es más probable en gatos adultos, machos no castrados y enfermos.
- LA TRANSMISIÓN HORIZONTAL MÁS HABITUAL ES A TRAVÉS DE LA SALIVA POR MORDEDURAS, ya que es necesario el contacto saliva-sangre o sangre-sangre.
- El riesgo de contagio entre gatos por contacto directo o íntimo que no se peleen es bajo, aunque no imposible.
- La trasmisión vertical de madres positivas a los gatitos sólo ha sido demostrada si se infecta durante la gestación, ya que la carga viral es mayor en las primeras fases de la infección (infección aguda).
- El virus sobrevive sólo unos minutos fuera del gato y es susceptible a todos los desinfectantes, incluido el jabón normal.
¿CÓMO SE DIAGNOSTICA EL FIV?
- El diagnóstico se hace mediante un análisis de sangre. El test detecta la respuesta inmune frente al virus, los anticuerpos (significa viremia).
- Los anticuerpos se detectan mediante pruebas de ELISA o IC, ya sea en kits de uso en la propia clínica veterinaria o bien en el laboratorio. Este test se suele realizar junto al de Leucemia Felina (FelV) previo a las vacunaciones y debe realizarse siempre que tengamos sospecha de alguna enfermedad o trastorno en nuestro gatito si no se ha realizado con anterioridad.
- Si el test es positivo es que el gato ha sido infectado por el virus. Los anticuerpos aparecen a las pocas semanas de infección.
- Pueden aparecer falsos positivos y negativos por distintos motivos:
- Mal manejo de los kit- test de ELISA y IC. Ejemplo: sacarlos rápido del refrigerador y no atemperarlos. Mirar las instrucciones.
- Falso positivo
- En gatitos de menos de 6 meses que realmente no estén infectados por el virus; en este caso estamos detectando anticuerpos maternales debido a que la madre está infectada. Se tendrán que testar de nuevo a los 8 meses.
- Baja prevalencia (proporción de animales infectados en una población).
- Vacunado en un país donde se aplica la vacuna para el FIV (Estados Unidos y Japón).
- Falso negativo en fases iniciales de la infección. Repetir el test al mes.
- Falso negativo en un gato en fase terminal de la inmunodeficiencia felina en la cual la producción de anticuerpos se haya agotado.
- En los casos dudosos con pruebas ELISA positiva se aconseja repetir el test la realización de una prueba de WBA (Western Blot Assay) que detecta varios anticuerpos específicos contra el virus en lugar de uno sólo como el ELISA. Se considera una prueba de confirmación y actualmente la ofrecen algunos laboratorios de nuestro país.
¿CÓMO ACTUA EL FIV?
- Infecta linfocitos, implicados en la respuesta inmunológica del animal.
- Tras la entrada en el animal, comienza a multiplicarse hasta llegar a un máximo de carga vírica sobre las 8-12 semanas tras la infección
- Posteriormente decrece el número de virus en sangre entrando en la fase “asíntomática”. Durante este periodo el virus entra en lo que se denomina un fenómeno de latencia que se refiere a cuando las células del gato llevan una copia del código genético del provirus pero no se produce multiplicación vírica.
- Los gatos en fase de latencia constituyen un reservorio y pueden infectar a otros gatos.
- Durante este periodo hay una pérdida progresiva de linfocitos.
- En algunos animales este proceso produce una inmunodeficiencia funcional, signos clínicos de SIDA y muerte.
ENFERMEDAD
- La mayoría de los signos clínicos que presentan los gatos con FIV no están causados directamente por el virus sino por infecciones secundarias que deben ser identificadas y tratadas.
- El virus por si mismo causa inmunodeficiencia (los gatos son susceptibles a infecciones secundarias y neoplasias) o inmunoestimulación (causando enfermedad inmunomediada).
- En las primeras semanas-meses postinfección pueden presentar pérdida de apetito, depresión, fiebre y aumento de tamaño de los ganglios linfáticos.
- Después entran en fase asintomática que generalmente dura años y en algunos casos, toda la vida.
- Los signos de enfermedad no empiezan a aparecer hasta los 4-6años de vida o animales mayores
- La inmunodeficiencia y/o inmunoestimulación suele aparecer en forma de:
- Gingivitis/ estomatitis crónica. Signo de presentación más común
- Rinitis crónica
- Fiebre
- Linfoadenopatías: aumento de tamaño de los ganglios linfáticos.
- Glomerulonefritis: afección renal que produce insuficiencia renal y proteinuria.
- Alteraciones neurológicas SNC y neuropatías periféricas
- Problemas oculares
- Problemas de piel: parásitos
- Tumores
- Pérdida de peso, caquexia
MANEJO DE LA ENFERMEDAD
- Pronóstico
- Un gato que es positivo a Inmunodeficiencia Felina NUNCA ES MOTIVO DE EUTANASIA
- Los gatos FIV-positivos PUEDEN LLEGAR A VIVIR TANTO COMO LOS NO INFECTADOS. La esperanza de vida de un gato positivo sano puede llegar a ser muy larga, incluso puede ser posible que no llegue a desarrollar la enfermedad.
- Tienen mayor probabilidad de desarrollar síntomas de enfermedad, principalmente debido a infecciones secundarias y enfermedades inmunomediadas o neoplasias.
- Los animales infectados a edades tempranas tienen mayor probabilidad de desarrollar enfermedad.
- Manejo general
- En este momento no existe vacuna contra el virus del FIV disponible en Europa.
- PROTEGER AL GATO frente a otras infecciones: el desarrollo de infecciones secundarias pueden no solo causar signos clínicos sino derivar en el progreso de la infección en sí misma.
- Mantener al animal sin acceso al exterior para minimizar la exposición a otros agentes (y evitar el contagio de la enfermedad a otros).
- Si existen otros gatos en la casa con patologías contagiosas es conveniente aislarlos.
- Esterilización para disminuir el riesgo de agresión.
- ¿Deben o no vacunarse frente a otras enfermedades los gatos infectados de FIV?
- Los beneficios y riesgos potenciales deben ser evaluados individualmente en cada caso.
- Los gatos clínicamente sanos se pueden vacunar.
- No vacunar cuando el gato esté enfermo con el síndrome de inmunodeficiencia o se trata de una gato casero sin riesgo de contagio de otras enfermedades.
- Se recomienda usar vacunas inactivadas para evitar cualquier riesgo potencial de causar enfermedad clínica.
TRATAMIENTO
- La mayoría de los medicamentos antivirales tienen sólo licencia para los seres humanos y están destinados específicamente para tratamiento de la infección por VIH, lamentablemente muchos de los medicamentos disponibles son tóxicos para los gatos o ineficaces.
- En un estudio se ha observados que el tratamiento con Zidobudina (AZT), efecto antirretroviral, en gatos seropositivos y con estomatitis puede dar efectos beneficiosos. Para este tratamiento el animal no puede presentar supresión de la médula ósea. Hay que realizar analíticas semanales durante el primer mes de tratamiento, ya que la anemia no regenerativa es un efecto secundario común. Si los valores son estables después del primer mes, un chequeo mensual es suficiente.
- Felina interferón-ω es activo contra VIF in vitro, pero de momento, sólo un estudio se ha realizado en gatos seropositivos no mostrando cambios significativos en la tasa de supervivencia en comparación con un grupo de placebo. En cambio en otros estudios el interferón-α humano a dosis bajas, efecto inmunomodulador, se observó una mejoría en los signos clínicos y en el tiempo de supervivencia, lamentablemente es un producto difícil de conseguir y con un costo elevado.
- Si el gato presenta alguna enfermedad oportunista o infección crónica debe ser tratado de forma normal. Las infecciones secundarias pueden ser tratadas de forma efectiva con antibiótico pero como estos gatos están inmunodeprimidos, se necesita a menudo un tratamiento más prolongado.
- En la actualidad no existe un tratamiento específico para el FIV.
La prevención, el control de colectividades, el diagnóstico rutinario, un programa de control parasitario, la esterilización para disminuir las agresiones y reducir el estrés del celo, en lo posible una vida más hogareña, junto con unos controles periódicos con su veterinario, serán las claves para el manejo de esta enfermedad.